A partir de esta semana, todos los autos que se inscriban en Chile deberán contar con Control de Estabilidad (ESP), un importante elemento de seguridad que puede salvar vidas. Mientras tanto, en Panamá ni siquiera existe una regulación para los frenos ABS, aunque existe un proyecto de ley en la Asamblea Nacional.
En pocas palabras, el Control de Estabilidad se apoya de los frenos ABS, además de una serie de sensores encargados de monitorear el ángulo de dirección y de la velocidad de giro, pudiendo frenar individualmente las llantas en momentos de peligro (falta de adherencia o derrapes), con el principal objetivo de evitar sobrevirajes o subvirajes.
Es un elemento de seguridad activa, desarrollado por Bosch en los años 90, y es tan crucial que en los mercados de primer mundo ya es obligatorio. Puede evitar el 80% de los accidentes causados por derrapes.
Según medios chilenos, en 2020 hubo más de 6,186 siniestros de tránsito y 97 fallecidos debido a la pérdida de control del vehículo. Así mismo, en la última década, fallecieron más de 2,800 personas por el mismo problema. Vale la pena mencionar que la regulación de los frenos ABS entro en vigencia en Chile en 2021 (leer fuente).
De esta manera, Chile se une a Argentina y Brasil, otros países donde ya es obligatorio vender autos con Control de Estabilidad (ESP). Por otro lado, en México empezará a regir desde 2024.
Panorama incierto en Panamá
En este tema, el mercado panameño se encuentra bien rezagado. De hecho, en nuestro país ni siquiera existe una regulación en favor de los frenos ABS, uno de los elementos de seguridad más básicos que existe y que ya lleva más de 40 años en la industria desde que los creara la propia marca Bosch.
Sobre este tema, el diputado Juan Diego Vásquez presentó un proyecto de ley que busca mejorar el equipamiento de este tipo en los autos que se venden en Panamá, pero al parecer dicho proyecto está estacando en la burocracia panameña, pues no hemos recibido ninguna actualización al respecto.
Al mismo tiempo, la Asociación de Distribuidores de Automóviles de Panamá (ADAP) tampoco ha mostrado interés en auto regularse. Además, a través de su representante consideraron que algunos elementos de la propuesta debían revisarse (leer nota).
En Deagencia: Proyecto de Ley 656